Introdujo el concepto del «desvestido público», unos vestidos sin mangas con las piernas descubiertas, utilizados sobre todo para la práctica del tenis. Isabel de Velasco, detalle de Las Meninas de Diego Velázquez (1656), Museo del Prado, Madrid. Algunas gramáticas establecen que las palabras terminadas en -á (tónica) se les añade también -es al hacer el plural (faralá – faralaes). El vestido femenino se basó por un tiempo en los corpiños en pico, que fueron sustituidos por los levitones o por el vlieger, un abrigo largo, sin talle, abierto por delante, sudadera fc barcelona con cuello en abanico.